El aluminio es uno de los materiales más utilizados en la industria moderna, pero ¿sabías que una porción significativa del aluminio producido en los Estados Unidos incorpora contenido reciclado? En una revelación importante durante la audiencia de investigación sobre la intensidad de las emisiones de gases de efecto invernadero el 7 de diciembre, el Institute of Scrap Recycling Industries (ISRI) y la Aluminum Association revelaron que este es un paso crucial en la sostenibilidad ambiental y la eficiencia energética.
Durante la audiencia realizada por la U.S. International Trade Commission (USITC), ambas organizaciones resaltaron el papel fundamental de la industria doméstica de materiales reciclados en ayudar a los productores de aluminio a abordar el cambio climático. Al suministrar materiales renovables de alta calidad como alternativas a los recursos extraídos, estos esfuerzos han contribuido notablemente a la reducción del consumo de energía y las emisiones de carbono.
Los datos presentados fueron impactantes. ISRI destacó que casi el 80% de la producción de aluminio en EE. UU. utiliza aluminio reciclado, en contraste con el promedio mundial donde solo el 30% del acero se fabrica a partir de contenido reciclado. Esta marcada diferencia subraya la eficiencia de los sectores del aluminio y el acero en EE. UU. en comparación con sus contrapartes internacionales.
Adam Shaffer, Vicepresidente Asistente de Comercio Internacional y Asuntos Globales de ISRI, hizo hincapié en el impacto ambiental significativo del reciclaje. «La industria de materiales reciclados de EE. UU. desempeña un papel vital en la lucha contra el cambio climático al promover un reciclaje seguro, económicamente sostenible y ambientalmente responsable. En términos generales, en los Estados Unidos, los productos reciclados ahorran anualmente el equivalente a casi 400 millones de toneladas de dióxido de carbono, igual al uso de energía de 48 millones de hogares durante un año.»
Charles Johnson, Presidente y CEO de la Aluminum Association, también testificó, reforzando el papel indispensable de materiales como el aluminio en la transición hacia la energía verde. «No es una exageración decir que no hay transición hacia la energía verde sin materiales como el aluminio. Esta creciente transición ha llevado a una inversión doméstica significativa, con casi $10 mil millones comprometidos o gastados en la construcción y expansión de plantas y operaciones de aluminio en EE. UU. durante la última década. Esto incluye la construcción de dos nuevas e innovadoras fábricas de laminación y reciclaje de aluminio actualmente en curso.»
Para enfatizar aún más el progreso ambiental, la Aluminum Association destacó que el impacto de carbono de la producción de aluminio en América del Norte se ha reducido a la mitad en los últimos 30 años. Este logro se atribuye a avances tecnológicos, mejoras en la eficiencia y un cambio de fuentes de energía a base de carbón a fuentes de energía renovable en los procesos de fundición.
Con estos avances y la creciente conciencia sobre la importancia del aluminio reciclado, es evidente que este material desempeñará un papel cada vez más crucial en la sostenibilidad ambiental y la transición hacia la energía verde.